La frecuencia, cada vez mayor, de dolor de espalda
y patologías de la columna vertebral, ha creado una gran inquietud en padres,
profesores e incluso alumnos que demandan asesoramiento e intervención en este
tipo de problemas.
Un dato muy importante a tener en cuenta, es que el
escolar realiza la mayor parte de sus actividades en la posición de sentado en
su pupitre o ante su mesa de trabajo, por lo que es de gran transcendencia que
la postura que adopte sea la correcta; así, una actitud postural viciosa, es
fatigosa y a la larga puede producir daños a veces irreparables en el aparato
locomotor.
Es fácil encontrar y cada vez con más frecuencia,
en todos los centros escolares, alteraciones de la columna vertebral
relacionadas con las actitudes y hábitos posturales erróneos de los escolares.
Podemos observar que el mobiliario
escolar existente en los centros es homogéneo para todos los alumnos de un
mismo ciclo educativo (infantil, primaria y secundaria), en tanto que los
alumnos de un mismo curso o ciclo no son homogéneos y; habría que realizar la
adaptación del mobiliario escolar a los alumnos teniendo en cuenta el tamaño de
su cuerpo (fundamentalmente la talla). También es frecuente observar malas
posturas que van adquiriendo éstos al sentarse, agacharse, andar, etc. y el
gran peso que transportan a diario en sus mochilas, carteras y carritos, de
forma inadecuada la mayoría de las veces. Finalmente, el hecho de que los
hábitos posturales puedan ser educables de forma correcta, o más fácilmente
corregibles cuanto más precozmente se actúe, hace que actuaciones de educación
postural a estas edades, resulten de gran rentabilidad a la sociedad.